
Hipoteca, personal, pareja, servicios, sobrinos... y la lista continua... eso es lo difícil de no morir... sin embargo, también lo interesante.
Siento unas ganas locas de reír... o de matarme.
Año con año arrastramos problemas, que a veces solucionamos y otras no; y el primer día laboral es el día en el que todo regresa a la cotidianidad, esa vida sin sazón que nos va matando de a poco.